permalink

por **Kurono Toya** Vie Abr 02, 2021 10:27 am

Demon Slayer RPG

Kurono ToyaWhy not destroy everything?

Datos básicos
Edad: 20 aparentes // 315 reales
Genero: Masculino.
O. Sexual: Demisexual
Clase: Demon
Especialidad: Potenciador.
Memento: Decay (崩壊, Hōkai)

Shigaraki Tomura (Boku no hero)

Fue = 10 + 2
Def = 10 + 2 + 3
Vel = 10 + 1 + 7
Per = 10 + 3
Técnica = 10 + 2
Sangre = 200 + Téc x5.

Psicología

La retorcida personalidad de Toya tomó forma durante los años como demonio, evolucionándose con el pasar de los años y tornándose cada vez más oscuro. Su retorcida y malévola forma de pensar lo llevan a tener poco interés por la vida misma, llegando a un extremo de mostrar una nula preocupación por los demás, e incluso, él mismo. Esto lo lleva a no medir sus acciones, sin tomar en cuenta los riesgos o consecuencias que pueden acarrear sus actos, lo mismo aplica a la hora de actuar; sin tener miramientos a la hora de elegir sus víctimas. Su comportamiento puede ser catalogada como infantil, enfocándose principalmente en lo negativo: arrogante, egoísta y demandante. Es fácil verlo frustrado cuando las cosas no salen como él lo planeó, teniendo una enorme desestabilidad emocional. Similar a un niño, muestra poco conocimiento de cómo enfrentar lo que llaman sentimientos y poder manejarlos de una manera apropiada, provocando que se desahogue con otros –física y verbalmente- o con él mismo, razón que dio nacimiento a su recurrente TOC. Pero los años le han enseñado, y hasta un demonio como él ha aprendido, y sigue haciéndolo. Tiene control sobre estos arranques de ira, y de ser recurrentes, ahora existe una probabilidad de 50/50.

No tiene remordimientos de su conversión, aunque poco recuerde de su vida como humano. Orgulloso de su estado como demonio, enfocando su razón de vivir únicamente en el poder, teniendo una singular idea de “sacudir” a la sociedad. Esto lo lleva a menospreciar a los humanos, e incluso otros demonios sin importar que estos estén por encima de él. Pero es capaz de dejar este orgullo de lado, cualquier cosa con lo que sea capaz de cumplir su objetivo. Su razón de colapsar a la sociedad es algo personal y arraigado a su vida como humano, aunque, él mismo admite que siente odio por todo lo que respira. Basando todos sus pensamiento y acciones en un extremo nihilismo.

Ignorando el hecho de que siente un disgusto extremo por la vida misma y cualquier forma de vida, fuera de cualquier calculo, existe ciertas excepciones. Sin conocerlo o tener algún recuerdo, siente y mantiene cierto respeto –y extrañamente, apego- por el demonio que lo convirtió, llamándolo comúnmente como maestro, a pesar de que en todos sus años de vida jamás haya vuelto a verlo. Sí, es imposible entablar una real amistad con Toya, pero hasta él mismo conoce y sabe el significado de la palabra “lealtad”. Ganarse un pequeño espacio en su tan selecto circulo es difícil, y depende cien por ciento de la impresión que causen en él, y lo útil que sean para sus objetivos. Quizás mide a todos como un objeto desechable, pero cuando un objeto causa una enorme impresión en Toya, esté lo cuidará con gran recelo.

Historia

Una familia en decadencia. Escuchó de la boca de su propio abuelo como sus antepasados combatieron en grandes batallas, verdaderos héroes que derramaron sangre y lágrimas por el país. Pero los años fueron acumulándose, y los tiempos igual que las estaciones, eran cambiantes. El apellido Kurono perdió el peso que alguna vez tuvieron, y lentamente fueron desmoronándose.

Dueños de sus propias tierras, Toya fue el segundo hijo de la casi extinta familia, separado por 3 años de su única hermana mayor. Sus padres no eran más que simples campesinos que luchaban día a día por sobrevivir. No calificaban como pobres, pero tampoco pertenecían a la alta sociedad. Su infancia cayo dentro de esa normalidad que su vida le permitía, unidos como una y mugre, ambos hermanos se podían ver juntos la mayoría del tiempo. Lo que hiciera uno, el otro también lo haría.

Pero todo cambió cuando esas ideas llegaron a la cabeza de Toya, la pequeña semilla fue plantada por su abuelo cuando este le contaba historias para que pudiera dormir. Y de la noche a la mañana se decidió, perseguiría un infantil sueño; quería convertirse en un valeroso guerrero, un héroe como algún antepasado lo fue. Pero para su padre, todo el pasado que el apellido Kurono acarreaba no era más que un tabú, el hombre jamás perdonaría a sus predecesores por haber seguido un anticuado código y haber hundido la familia por completo. Desconociendo ese arraigado odio que su progenitor tenía, Toya se zambulló en su inocente sueño. Recuerda el primer golpe, la fulminante mirada y las duras palabras que recibió de su padre, todo cuando encontró al pequeño practicando con una espada de madera.

El ultimo hecho se repitió más de una vez a lo largo de los años, día a día, en su memoria quedó impregnado la imagen violenta de su padre. Pero Toya no abandonaría su sueño tan fácilmente, sabiendo que eso era el gatillo para la ira de su progenitor. Saboreó por primera vez la traición; vio como su familia nunca puso un alto para lo que el pequeño vivía todos los días. Su madre fiel a su marido, no decía nada, y muchas veces intentaba razonar con Toya para que se detuviera. Y su hermana simplemente ignoraba todo lo que sucedía, aunque en secreto, en ocasiones intentaba consolarlo con alguna palabra o acción.

— ☽○☾ —

— Me casaré, padre lo arregló todo, será en unas semanas más… No debes estar triste, todo es por el bien de la familia. — Las palabras de su hermana calaron en su cabeza, y borraron cualquier pensamiento que pudiera tener o nacer en el momento. Calló y se retiró, lo poco y nada que tenía solo iba a desaparecer. En la noche, Toya se atrevió a encarar a su padre por la decisión que había tomado con su hermana. La discusión no hizo más que escalar, de gritos a insultos, de insultos a golpes. Fue la primera vez y última que Toya respondió a su padre. Con sus propias manos acabó matándolo, sintió como su cuello ardía, picaba y nada parecía detener la extraña sensación.

Rascó su cuello sin detenerse, sintió como su propia piel se rompía, como la sangre fluía por sus dedos, pero aun así no se detuvo. Congelado, observando el inmóvil cuerpo de su padre. Su madre soltó un ensordecedor gritó cuando entró a la habitación y vio tal escena, Toya instintivamente se abalanzó sobre ella, y lo último que recuerda es estar sobre ella, con sus manos rodeando el cuello ajeno, estrangulándola y viendo como la vida se desvanecía en sus ojos.

Cuando corrió con su hermana y le contó todo lo sucedido, ver cómo era juzgado por la mirada ajena volvió a desencadenar su ira. Se repitió, lo mismo que sucedió con su padre y madre, sucedió con su hermana. Contrario a lo que alguna vez soñó, acabó exterminando a toda su familia. Antes de abandonar su hogar, cortó una de las manos del cadáver de su padre, y lo guardó como una especie de recuerdo.

— ☽○☾ —

Deambuló por unos meses más, hasta que una noche acabó desvaneciéndose en plena calle. Un final dignó para la vida que llevó, se sintió satisfecho y aceptaba el final que estaba obteniendo. Sintió como todo acabó desvaneciéndose, el dolor, el frío, el hambre. Pero ese odio jamás logró desaparecer. Lo ultimó que vio, una extraña sombra que se le acercó murmurando algunas palabras.

— Toya…Kurono Toya…¿Acaso no somos hermanos? — Retumbó en su cabeza. Su piel sintió el calor de una improvisada fogata, y sus ojos al buscar algo familiar, se encontró al interior de una muy frágil cabaña. — Por fin despertaste, ya pensé que habías muerto — Un viejo hombre caminó al interior con confianza, el dueño del humilde hogar — No sabía que olía tan mal, tú o esta cosa que llevabas en los bolsillos. Seguro es importante para ti, pero deberías tener más cuidado, cualquiera no lo tomará tan bien como yo. — Le lanzó la mano de su padre que aún conservaba, embalsamada y perfectamente momificada para que pudiera perdurar por los años — No sé qué cosas terribles hiciste en tú vida… Pero todo el mundo merece una segunda oportunidad, y si quieres, yo puedo darte una — El hombre se agachó y le estiro la mano, un viejo que veía a un pequeño niño perdido — Mei… — Fue lo último que murmuró, antes de abalanzarse sobre esa pobre alma.

Ensangrentado y con trozos a su alrededor de un cadáver que difícilmente se podría identificar. Salió de esa maltrecha cabaña, y en la oscura noche, se internó en el bosque.

extras

I.- Es común que cuando sufre alguna frustración o se ve sometido a un enorme estrés rasque sin compasión su cuello e incluso rostro, dándole poca importancia que él mismo dañe su propia piel. Esto es un TOC –Trastorno Obsesivo Compulsivo-, un pequeño vestigio de su antigua humanidad.

II.- Mide 175 centímetros y su peso bordea los 65 kilogramos.

III.- Su cabello, al momento de convertirse en demonio, tomó un color blanco puro. Y es que, durante su niñez, y hasta sus últimos momentos de vida, lucía una cabellera completamente negra. Pero a diferencia de su cabello, conservó el color de sus ojos, un singular y extraño color rojo.

IV.- Mantiene conocimientos sobre el manejo de la espada, y eso es gracias a sus años como humano. Aun así, como demonio, jamás ha tomado una, y tampoco piensa hacerlo, prefiriendo matar sus presas con sus propias manos.

V.- Cuando despertó, dos cosas vinieron a su cabeza, dos nombres: el suyo, y el de su hermana, Mei.

por **The ugly** Vie Abr 02, 2021 4:03 pm

Demon slayer

Información

Cuando termines tu expediente, por favor vuelve a responder en este mismo tema y alguien del staff pasará a corregirte con la mayor brevedad posible.

¡Te esperamos en el último año solar!

en caso de tener dudas avisar al staff

por **Kurono Toya** Sáb Abr 03, 2021 12:31 am

Ficha terminada y lista para correcciones.

por **The ugly** Sáb Abr 03, 2021 4:29 am

Demon slayer

ficha aceptada

Kurono Toya | ID

permalink

permalink

permalink

permalink

permalink